Desde el taller de Picanya en Valencia, sabemos que para que un coche siempre se encuentre en perfecto estado de funcionamiento necesita revisiones periódicas de puesta a punto. Cuidar de tu vehículo, te asegura evitar futuras averías.
En un servicio de mantenimiento, los mecánicos de Valencia revisarán el aceite, el agua y el líquido de frenos. Elementos necesarios que se deben revisar cuando tu coche llega o pasa de los 10.000 kilómetros, además se inspeccionará el estado de las ruedas, la suspensión y los faros.